Zacatecas, Zac.- El Presidente del Comité Directivo Estatal (CDE) del PRI, Carlos Peña Badillo, emitió un enérgico llamado a los integrantes del gobierno estatal, instándolos a cesar las distracciones políticas. El líder priista fue categórico al afirmar que no son momentos electorales, sino un periodo donde los funcionarios deben enfocar toda su energía en ofrecer resultados concretos y abordar las profundas crisis que aquejan a la entidad.
Peña Badillo señaló que Zacatecas atraviesa por una etapa «severa y compleja,» a pesar de lo cual ha observado una clara indicación desde el Ejecutivo estatal para posicionar a quien se perfila como el aspirante predilecto para liderar el proyecto político de Morena.
En este sentido, el dirigente exhortó a los funcionarios del gobierno, independientemente de sus ambiciones futuras, a no desviar su atención de las responsabilidades actuales y, sobre todo, a no utilizar los recursos públicos con fines de promoción personal. La necesidad inmediata del estado, recalcó, es la de atender las crisis persistentes en áreas vitales como la salud, la educación, el campo y la inseguridad.
El Delegado General del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI, José Marco Antonio Olvera Acevedo, secundó la postura de Peña Badillo, coincidiendo en que la prioridad indiscutible es la entrega de resultados. Olvera Acevedo tachó el uso de fondos públicos por parte de Morena para proyectar a sus cuadros como una «falta de respeto y un agravio» hacia la población zacatecana.
El delegado criticó que, mientras Morena está inmerso en una «Fiesta Electoral» enfocada en el posicionamiento de figuras, tanto el estado como el país se encuentran sumidos en el desorden, evidenciando una incapacidad para resolver problemas urgentes. Subrayó que, si el oficialismo considera que ya es tiempo de hacer política, deben hacerlo demostrando su capacidad mediante la gestión efectiva, no la promoción.
El líder estatal del PRI subrayó la necesidad de separar el calendario administrativo del proselitista, indicando que la distracción del gobierno en la sucesión del Ejecutivo perjudica directamente a los ciudadanos que padecen los efectos de la crisis.















