Por Andrés Vera Díaz
¿Porqué en días pasados de manera explosiva, sale al escenario la senadora Verónica Díaz, aspirante a la candidatura de Morena a la gubernatura de Zacatecas? La respuesta tiene dos explicaciones esenciales: una es elevar el nivel de conocimiento de su nombre; la otra fue evadir los negativos de David Monreal.
Desmenucemos cada aspecto. Morena planea ya aplicar próximamente las encuestas y definir a l@s candidat@s a gubernaturas en 2027. El calendario tentativo marca que en noviembre inician las respectivas denominadas “del descarte”, es decir todos y todas que levantaron la mano quedarán solo seis (tres hombres y tres mujeres). La segunda encuesta «de género» es en mayo (aunque podría adelantarse a marzo); es decir, el perfil más competitivo asigna género.
La premura y previsión, es primero atajar las disputas internas que van subiendo de tono y generar un “cierre de filas” en la antesala del Mundial de Fútbol, para evitar que se genere una crisis institucional que pegue directamente a las estructuras de los gobiernos estatales y por supuesto, del gobierno federal. ¿Porqué pasaría en dado caso?, pues hay figuras que podrían ser catapultadas a candidaturas que tendrían que dejar el cargo, por ejemplo, nada menos y nada más que Rosa Icela Rodríguez, actual secretaria de Gobernación.
Así pues, la perspectiva indica que ya elegidos las y los coordinadores en defensa de la 4T en casa entidad federativa, daría pie a la negociación e impulso tácito para otras candidaturas como diputados locales, federales y alcaldías. Claro, con la “aplicación” de encuestas, ya en firme la apertura del proceso electoral en el último trimestre del 2026.
La pretensión proyecta que en agosto del próximo año, los nombramientos de las y los defensores de los comités de la 4T en los estados estén asentados. Hasta el momento se plantean 10 candidaturas para mujeres y 7 para hombres. En ese escenario, se analizará si se hacen o no ajustes dependiendo de los perfiles más competitivos en cada entidad
De ahí nace pues la urgencia de posicionar mediáticamente a mujeres en Zacatecas, pues si ninguna de las aspirantas rebaza a los masculinos, la probabilidad de permuta es baja, pese a que se pretenda establecer horizontalmente la paridad de género. Es decir, no forzosamente debe existir un número equilibrado entre hombres y mujeres. La prioridad será colocar hasta una mujer más que hombre, pero si la competitividad remarca que hay hasta 12, 13 o 14 mujeres, entonces se trata de asegurar la probabilidad de victoria, no de forzar la equidad en términos de género, y en este sentido, la legislación establece que se le debe dar prioridad a las mujeres.
En este contexto, son mayoría las mujeres competitivas que alcanzarían candidatura en la mayoría de los 17 estados que realizarán elecciones locales. En la lógica de esa preferencia de género, es como se catapulta a Verónica Díaz para que se coloque en las encuestas por encima de aspirantes varones y así, delimitar la posibilidad de permuta en la candidatura con estados dónde un hombre pueda ser el que posea mayor probabilidad de obtener el triunfo.
Entonces, ante la llegada de los tiempos de levantamientos de la primera encuesta, en la que se pretende “descartar”, casi inexorablemente el davidismo intentará colocar a por lo menos dos mujeres en esa ruta. Verónica Díaz y Susana Barragán, con una tercera posición que podría corresponder a Julia Olguin o a Geovanna Bañuelos en una especie de legitimación de la encuesta.
En cuánto a los varones, sin carta propia, David y la senadora Díaz querrán levantar tibiamente a Carlos Puente Salas, no obteniendo el primer lugar, tal vez el segundo para colocar en un escenario de ventaja a Díaz en la segunda encuesta, abdicando a su favor, como el propio diputado Verde ha expresado anteriormente en el podcast INSURRECTO. De tal suerte, que sea Díaz quien gane la demoscopia definitoria y sea ungida como la cuasicandidata en términos prelectorales.
Por estas razones, Díaz no ha sido ni estridente visible durante el primer año de ejercicio constitucional en el senado. A tientas, manejo de redes sociales aderezado con el apoyo de los medios ultraoficialistas locales y sin apegarse visiblemente a la figura de David Monreal, quien carga con la menor aprobación entre gobernadores de manera consistente, en cada encuesta mensual al respecto, casi desde que asumió.
¿Pero, entonces, porque ahora así casi como epifanía sale a relucir el apoyo de parte de la estructura gubernamental a favor de la senadora, aunado a las palabras de reconocimiento de David en el contexto de eventos oficiales? La lógica de los reactivos de las encuestas prácticamente evoca esa estrategia de posicionamiento, porque de eso se trata en esta etapa.
- ¿Conoce usted a….?
- ¿Quién le gustaría que fuera la o el candidato de Morena para la gubernatura?
- ¿Votaría usted por…?
Los reactivos serán como se planea hasta el momento, los mismos pero adaptables, en relación a la encuesta para determinar a la candidata de Morena a la Presidencia de la República en 2023. El método que fue el pactado entre “corcholatas”, fue el que legitimó a la ganadora en su momento (Claudia Sheinbaum). Entonces, ¿para qué modificar la esencia si esa fue la pertinente y aprobada por cada aspirant@?
Por tal motivo, ahora no se trata de fomentar la intención de voto como objetivo único, sino de primeramente posicionar a la aspirante (en este caso, Verónica Díaz) como la más conocida, independientemente de la plataforma que se use, para posteriormente, emitir un cierre de filas con quienes aparecerán en la primera encuesta, para dar un manotazo rumbo a la segunda encuesta, ya con estructuras de por medio.
Ahora, como señalaba anteriormente, la lógica obedece a no abrir la posibilidad de permuta, pues en una gran cantidad de estados, son mujeres las que llevan la batuta (que no es el caso de Zacatecas hasta el momento); sin embargo, el primer filtro de conocimiento debe ser sopesado a costa de los negativos de David, porque la identificación per se no será a costa de emitir el mensaje de continuismo (que promovería además denuncias por proselitismo anticipado ex profeso), sino con el elemento de la presencia en eventos de entrega de programas sociales, infraestructura o como el que se registró, una feria agropecuaria.
Así pues, la cargada específica intenta emitir no un mensaje al electorado de media clase, sino a quienes son directamente beneficiarios de asistencia social, pues ante la casi asentada aplicación de la encuesta de manera presencial, casa por casa, esperan que sean entre el nicho de mayor captación electoral, donde se concentren las mismas, de tal forma, el nivel de conocimiento tendrá un efecto práctico.
Para concluir, esta es la estrategia que se persigue afanosamente sin incluir la mediatez con entrevistas extensivas o abiertas de par en par. El cuidado de no vincularse en el contexto de un gobierno con baja aprobación, y un gobernador sin mucha legitimidad, hace pertinente trabajar nivel abajo. ¿Cómo se compite contra eso? Veremos si entre la oposición interna morenista existe precisamente ese cierre de filas.















