Por Andrés Vera Díaz
Otras vez el alcalde de Fresnillo, Javier Torres Rodríguez se encuentra envuelto en un escándalo de conflicto de interés con empresas ligadas a la familia.
El 21 y 24 de abril de 2024, periometro.mx publicó dos investigaciones respecto a como «Javo Torres, recibió más de 170 millones en contratos para sus empresas en gobiernos tricolores» y otra titulada; «Javo Torres, los conflictos de interés relacionados con cargos públicos y empresas«. Los texto jamás fue desmentidos, solamente replicados tímidamente a través de WhatsApp por el hoy traicionado Pepe Haro.
Fue días antes, cuándo el entonces diputado morenista Ernesto González Romo, exhibió con pruebas documentales, que durante la administración de Miguel Alonso Reyes, Torres cobraba por cada una de sus radiodifusoras $522 mil pesos mensuales; es decir, por todo el sexenio de Alonso Reyes recibió poco más de 75 millones de pesos en contratos por publicidad, “No es broma, 75 millones por hablar bien del gobernador más corrupto en la historia de Zacatecas”, expuso González.
Pero el tema no quedaba ahí, como propietario de la empresa DVS producciones, Javier Torres consiguió 57 contratos por un monto de 51 millones 229 mil pesos por la presunta elaboración de materiales audiovisuales para la administración priista de Alonso.
Contratos Javier Torres emp… by Andrés Vera Díaz
En el Congreso local (LXI Legislatura), aprovechándose de su encargo como legislador, 232 mil pesos mensuales recibían las radiodifusoras de Torres por la administración de Pepe Haro en Fresnillo, recurso que luego ascendió a los 370 mil pesos mensuales cuando Javier Torres fue alcalde interino.
No solamente el conflicto de interés y el influyentismo se hicieron patentes. sino los groseros contratos exhibían el derroche de las administraciones priistas que erogaban grandes cantidades de dinero en beneficio de sus propios correligionarios, (para aquellos con medios y cargos).
Ayer, fue el turno del diputado local Martín Álvarez, quien también vía documental demostró que Javo continúa con ese anterior esquema de favoritismo a las empresas familiares sin ningún tipo de pudor.
Pero además del cinismo, ahora el alcalde fresnillense se tira al piso como niño emberrinchado. Un post en su perfil de Facebook se limitó a tirarse al piso a lloriquear sin dar explicaciones de los contratos pasados y presentes, ni tampoco aquellos que vinculan al petista Víctor Bravo Piña, coordinador de asesores del Ayuntamiento. Ahora queda claro porqué Bravo se decantó por el PRI, más que una posición política de que Morena soslayara al PT de la alianza electoral.
Resulta que las empresas Grupo Pina Co, S.A. de C.V y de Torres Corporativo Radio S. de R.L., cuyos representantes tienen una relación por consanguinidad con los servidores públicos mencionados, tan solo en el mes de noviembre, recibieron pagos que ascienden a casi un millón de pesos por diversos servicios, a pesar de que la Ley General de Responsabilidades Administrativas clasifica estas acciones como faltas graves.
La radio de la familia del alcalde, se llevó la cantidad de 208 mil 800 pesos por la transmisión a control remoto de la toma de protesta del presidente municipal, sí, el mismo acto que muchos medios ni siquiera cobraron. La familia de Torres es PRImero.
Apenas rindió protesta, Javo Torres «denunció saqueo de bienes y servicios», como el adeudo del Sistema Municipal de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de Fresnillo (Siapasf) con la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Además, que funcionarios de la administración de Rita Quiñones de Luna, se llevaron mobiliario, equipo de cómputo, impresoras y hasta artículos menores como tornillos y cuadros. Señaló que estos bienes no pertenecen a los funcionarios, ya que fueron adquiridos con recursos del municipio. También informó que el equipo tecnológico recientemente adquirido por el departamento de Comunicación Social, como cámaras fotográficas y drones, fue dado de baja bajo la excusa de ser “inservible”, lo que calificó como una estrategia para justificar su desaparición.
A todo lo anterior, ni una denuncia legal, pero ante el «desfalco» al estilo Miguel Varela, se atrevió a erogar los 208 mil pesos para sus empresas. Claro, para el negocio familiar si había dinero, faltaba más.
El 18 de septiembre del año pasado, Torres pidió paciencia a los ciudadanos, ya que al asumir su cargo encontró oficinas vacías, sin equipo para trabajar y con las finanzas municipales en estado crítico. A pesar de estos obstáculos, Torres Rodríguez aseguró que ya está gestionando recursos para restablecer las operaciones del municipio y abordar los problemas más urgentes. Pero que cínico «funcionario».
Torres ya tiene un historial de conflicto de interés, pero su estrategia es guardar silencio o tirarse a lloriquear, como una pobre víctima del ataque político. Sin credibilidad y sin justificaciones, el también «locutor» que aprovecha su plataforma para hacerse publicidad gubernamental, se enfrenta a la crítica severa, hasta de aquellos que desde la prensa opositora, nos decían que era el gran salvador de Fresnillo. De risa.