Por Andrés Vera Díaz
Nombres van y vienen, pero pocos con real representatividad social o trayectoria personal. Muchos se postulan dependiendo del apadrinamiento (que por cierto, esos padrinos impulsan a varios para que alguno quede) o de la manifestación virtual de fortaleza.
El 2018 será un parteaguas en la historia del país. Una elección recurrente pero con un simbolismo importante, pues no sólo se juega el cambio de régimen, sino la presencia inmediata de un partido nuevo como MORENA. En el PAN también sueñan con grandes posiciones, por lo menos el 2015 fue un año de mucho alimento electoral y poder para el blanquiazul.
Otros partidos como el PRI, que van a la baja, no pueden ser descartados, finalmente poseen la estructura más rígida del país. El PRD, desfondado, ahora modifica su forma de pensamiento y vende sus migajas bajo la premisa de que “sin nosotros nadie gana”. Curioso, tan sólo hace 6 años competían férreamente por la Presidencia de la República.
Sin embargo, muchos aspiran a ser candidatos no bajo la idea de aportar, sino al contrario, depender del voto en cascada que llevaría consigo López Obrador, en estos términos, cualquiera ya quiere “servir”, pero la realidad de las cosas, es que son pocos los que en verdad mueven el engranaje. Geovanna Bañuelos una de ellas.
Pero, existen otros personajes que no son vistas como meras oportunistas, sino que han creado un ideario colectivo de cambio, con trabajo trascendental y pugnando por nuevas formas de pensamiento humano y también, en el marco legal. Me refiero a Mara Muñoz Galván, quien a pesar de haber expresado en alguna ocasión que no pretendería ir por un cargo de elección popular, no descarta del todo en su presupuesto de aportación social, contender por la alcaldía de Zacatecas, y por MORENA.
No, no es una idea descabellada, mujer joven, inteligente y de ideales sólidos, ha formado como pocas, un andamiaje en la defensa de los derechos de las mujeres con presencia y ruta, sin depender de formas políticas ni patrones sexenales. Eso, eso cuenta mucho.
Para la capital, son pocas las opciones que tiene dicho partido, con legitimidad pues. Mara es bien vista tanto por académicos de relevancia, como por activistas, políticos, periodistas y sociedad en general. Ningún otro podría presentar tales cartas, eso es una verdad innegable.
La alcaldesa actual, Judit Guerrero apuesta a la reelección, y aunque con sus negativos, ha solventado una administración sólida con un presupuesto condicionado, el fantasma de la elección ordinaria la persigue. Por otros lados, suenan Arturo López de Lara y ya. Una competencia interesante sin duda, pero ante el probable arribo de Mara como contendiente, una victoria de MORENA en las urnas, (sin los miles y cientos de miles en publicidad feisbuquera), pudiera ser factible. ¿Qué opina usted?.