Por Saúl Monreal Ávila
Aunque sabemos que el deporte siempre ha sido uno de los temas pendientes de los gobiernos mexicanos, el papel que los atletas representantes de nuestro país han dado en las justas olímpicas de Brasil ha llamado seriamente la atención de propios y extraños, no por la obtención de medallas olímpicas, sino por la lamentable desatención en la que se encuentra el gremio deportivo.
Y es que, cómo exigirle medallas y buenos resultados a los deportistas que participan en las olimpiadas representando a nuestro país, cuando el primer obstáculo que deben enfrentar para prosperar en su carrera deportiva es la ineptitud, la corrupción y desatención del mismo gobierno mexicano. En este escenario adverso, los deportistas son triunfadores a pesar de nuestras autoridades.
Pero la gota que derramó el vaso es que tipejos como Alfredo Castillo, quien dice ostentar la titularidad de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE), vayan a Brasil acompañado de amigos, amantes y familiares, derrochando el dinero que debiera ser destinado para los atletas de alto rendimiento. Qué pena que haya competidores que literalmente tuvieron que “botear” para el boleto de ida a los Juegos Olímpicos.
Al día de hoy, los mexicanos piden explicaciones al ocupante de la CONADE, ya que además de haber retirado y negado apoyos a las federaciones mexicanas, ha enviado sin uniformes a los competidores en las justas olímpicas. No solo eso, sino que, como una muestra de la clase de cinismo con la que se conducen muchos funcionarios priistas, ahora pretende “colgarse” las medallas obtenidas por atletas mexicanos.
Y es que, si analizamos los presupuesto de federales de los últimos tres años, podemos ver que el gobierno mexicano recortó el presupuesto al desarrollo y al apoyo del deporte más de 60 por ciento. Según una investigación del portal Animal Político, esto implicó más de cuatro mil millones de pesos a los subsidios y apoyos que se otorgan a institutos de deporte en los estados y a las federaciones deportivas.
Pero en Zacatecas no estamos exentos de las corruptelas y desatención al deporte, el día de ayer tuvimos la fortuna de ser invitados a inaugurar una cancha de basquetbol en Fresnillo que anteriormente era una bodega vacía, resulta lamentable que las autoridades no intervengan en lo más mínimo para brindar espacios dignos a los jóvenes, ya que fue gracias a una iniciativa ciudadana que ahora tienen un espacio para practicar deporte.
Lo dijimos en la máxima tribuna del estado cuando fuimos parte de la LX Legislatura Local, el deporte debiera ser un tema de especial interés para los gobiernos. Incluso propusimos desde la presidencia de la comisión de la niñez, juventud y deporte, la necesidad de convertir al deporte en una política pública integral y transversal, que esté presente en todas las acciones de los gobiernos, incluida la misma función pública. Y lo sostengo.
Por eso no quitamos el dedo del renglón, porque da impotencia ver casos como el de Fresnillo, donde el espacio deportivo más digno del municipio ha sido ocupado desde años atrás por la Secretaria de Marina sin permitir a los jóvenes hagan uso de él. O como en la capital, donde se inhabilitaron espacios deportivos para convertirlos en estacionamientos de la feria, obteniendo un beneficio económico. Para el PRI Gobierno, el deporte es un negocio.
Entonces, ¿Cómo preparar a jóvenes talentosos para ganar competiciones, si no tenemos siquiera espacios dignos? ¿Qué postura debemos tomar como ciudadanos para no permitir el atropello al gremio deportista? La claves es replicar lo que nuestros amigos de Fresnillo hicieron, hasta para practicar deporte debemos organizarnos. Por salud, por seguridad, por los jóvenes.