El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y el gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge, iniciaron hoy el Debate Nacional sobre el Uso de la Marihuana en Cancún, Quintana Roo. El encuentro tiene, entre otros, el objeto de crear nuevas políticas públicas y poner la situación nacional en un contexto internacional.
Se podría utilizar para el tratamiento de personas con enfermedades crónicas o terminales, cuyos padecimientos paliaría.
Pros
Se han propuesto, como los hay en otros países, ‘clubes de canabis’ para acabar con entramados de narcomenudeo.
Acercaría el país a un estado de mayor civilidad y tolerancia.
Ayudaría en la erradicación del hermetismo y los prejuicios arraigados en la cultura mexicana.
El narcomenudeo es de los principales generadores de violencia en México.
La legalización representaría un gran paso para la posibilidad de libre albedrío a nivel nacional.
Beneficiaría a diversas industrias, como la agrícola.
Contras
Aunque el consumo crónico de la marihuana no crea dependencia física como algunos barbitúricos y otras drogas, sí tiene repercusiones en tanto que el usuario es propenso a una dependencia sicológica.
A la larga, introduce al consumidor crónico en estados de aletargamiento y aturdimiento, atenuando su capacidad de desempeño mental.
Su consumo diario produce apatía.
La capacidad respiratoria regular es perjudicada.
Puede (y, por supuesto, no como realidad general) conducir al consumo de otras sustancias que alteren el sistema nervioso central.
Debido a la corrupción en México, la regularización de la venta sería trastornada o, en el peor de los casos, ignorada.
Su legalización quizá no tenga ningún efecto negativo para el narcotráfico.
Finalmente, si para algo son hechos los debates, es para propiciar un diálogo en que todos los criterios puedan ser considerados en toda su amplitud.