Por Ramón Vera Salvo
Estamos a 4 meses de que se cumplan 3 años de gobierno de Enrique Peña Nieto y las cosas no parecen irle muy bien, Lo malo es que no le van mal sólo a él. Le va mal también al país.
EL Banco de México, bajó, por octava ocasión la previsión de crecimiento de la Economía Nacional: de 2.6% a 2.55%. Estamos en agosto y es la octava vez que se disminuye la perspectiva de crecimiento. A este paso, para diciembre estaremos llegando a menos de 2% de crecimiento del PIB. Algo realmente preocupante porque significa que no se crean los empleos que la demanda de trabajo necesita, a pesar de la propaganda oficial que nos bombardea con supuestas inversiones que han creado muchos miles de empleos, además de «clase mundial» dicen los spots pagados por el gobierno. Quién se la cree?.
Le seguridad está en uno de sus peores momentos. En lo que va del sexenio de Peña Nieto ha superado por mucho las cifras de secuestros, asesinatos, extorsiones que en el mismo periodo de Calderón lo cual ya es mucho decir porque el sexenio de Calderón fue uno de los peores en esta materia. Y como broche de oro, se les fuga el Chapo Guzmán. Bueno, hay quienes afirman que fue una fuga pactada por temor a que E.U. insistiera en la extradición y el Chapo «soltara la sopa», lo que provocaría un terremoto político de muy graves consecuencias. Lo cierto es que la forma en que dicen que escapó ha generado demasiadas dudas y a la fecha no hay ningún responsable.
Los precios del petróleo siguen a la baja, con el consecuente efecto en las finanzas públicas. Ya para el próximo año se han anunciado recortes en el presupuesto de egresos. Para colmo la mal llamada Reforma Fiscal, no ha dado resultados y lo único que ha provocado es malestar en el empresariado y en la población en general-
El peso se ha devaluado en más de 25% en este sexenio y aunque Videgaray diga que no tendrá efectos en la inflación, de seguro lo tendrá ya que afecta a las importaciones no sólo de bienes de consumo, sino de bienes de capital y materias primas. Ese afán de las autoridades a negar todo y a arreglar las cosas con sólo declaraciones no soluciona los problemas, sino que los empeora porque al negarlos no se busca solución.
La ronda uno para las licitaciones de exploración y explotación de petróleo fueron un fracaso: de 12 lugares ofertados solamente dos se adjudicaron. Los miles de millones de dólares que dijeron llegarían de inversiones al abrir la explotación de hidrocarburos al capital extranjero simplemente no llegan. Claro, dice Peña Nieto que hay otros países que están peor. De verdad señor presidente con esta «explicación» usted ya se queda tranquilo? y duerme bien?
La corrupción en el gobierno federal, así como en la de todos los gobiernos estatales en los que gobierna el PRI es escandalosa. La impunidad con que actúan es sorprendente.
Con razón la última encuesta proporciona datos que no es de sorprenderse. Entre los empresarios la aprobación del presidente bajó al 15% y entre los ciudadanos bajó a menos del 30%. Y qué hace Peña Nieto ante esto?. Nada. Se refugia entre sus incondicionales y agacha la cabeza para no ver. En cualquier país del mundo (tal vez esta afirmación es una exageración), pero en la gran mayoría de los países que se dicen democráticos, ya habría renunciado más de un ministro o les habría pedido la renuncia el presidente. Pero estamos en México y gobierna el PRI.
Por cierto, la llamada izquierda no aparece, ni hace nada.
Así las cosas