Andrés Vera – PM
En Zacatecas, el número de personas en situación de indigencia no es conocido a cabalidad. Ninguna institución o dependencia gubernamental tiene estadísticas concretas acerca de este fenómeno social derivado de la falta de empleo, marginación, sistema educativo precario, alcoholismo y drogadicción, además de la inexistencia de políticas de desarrollo viables.
En la época decembrina, se incrementa de forma evidente el número de indigentes en las principales calles de la capital y de las cabaeceras municipales al amparo del espíritu navideño para poder hacerse de una moneda o donativo de los transeúntes que corren de un lado a otro buscando la oferta para el regalo del 25 de diciembre.
Zacatecas es uno de los sietes estados con mayor índice de marginación y pobreza según la Medición de la Pobreza por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
De acuerdo a dichos datos, los índices de pobreza disminuyeron 6 puntos porcentuales en 2010 respecto a 2012, pero la entidad aún continua por arriba de la media nacional, que es de 45.5 sobre 54.2 por ciento.
El estudio de la Medición de la Pobreza y Pobreza Extrema nacional revela que en Zacatecas el número de gente pobre pasó de 911 mil 500 en 2010, a 835 mil 500 al cierre de 2012.
Dicha situación que se proyecta en la indigencia, se ve recrudecida de manera palpable durante diciembre. Tan sólo en la capital del estado, en el primer cuadro del centro histórico, en un recorrido de 10 km lineales en la que se abarcaron 25 calles de mayor afluencia peatonal y vehicular, PerióMetro.com contabilizó 48 personas en esta situación infrahumana; lo que se traduce que en promedio cada 208 metros se puede encontrar a un ser humano solicitando limosna, encobijado tirado en el suelo y en algunos casos, acompañados de menores de edad. De esas 48 personas contabilizadas, 35 son habitantes de la capital, 6 de municipios aledaños y 7 de paso, es decir, son provenientes de estados como San Luis Potosí, Distrito Federal y Michoacán.
El DIF municipal de la capital, no cuenta con albergues para este sector. Tampoco numerología específica. A pesar de que el propio Sistema reconoce de manera oficial el número de personas con déficit alimentario en las que por razones obvias se integran los indigentes, cuya cifra asciende a 369 mil, que contrasta con el número de pobres que es de 835 mil en los datos Coneval 2012, no existen programas de atención específica.
Sólo en el 2013, se tenía la implementación de apoyo a 985 adultos mayores en los que se adhirieron indigentes de la capital que integraban el padrón del programa Sumando a los Abuelos, coordinado entre el DIF estatal y el municipal. En este programa se les da 800 pesos bimestrales, además de que son canalizados a otros programas de apoyo estatal y federal para mejorar su situación económica.
Gabriel Navarrete Velasco, director del DIF municipal de Zacatecas, admitió el 28 de julio del 2013 que aún no se tiene un padrón sobre la situación individual de cada uno y a un año y medio de la declaración, no se tiene contabilizado.
Navarrete Velasco advirtió que hay temporadas altas dentro de la mendicidad, no meramente entre adultos mayores, sino entre varios grupos sociales; en temporada vacacional, en diciembre y durante los festivales hay más indigentes en la capital, sin embargo, la atención a este grupo vulnerable ni siquiera forma parte del Plan Estatal de Desarrollo que anunciara Miguel Alonso Reyes al inicio de su administración, ni tampoco está ubicado como un problema primordial para el ayuntamiento capitalino.
El año pasado, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) fueron indigentes casi 15 millones de mexicanos. Se trata de 40 millones 778 mil mexicanos que perviven bajo la línea de la pobreza y 14 millones 940 mil en la indigencia.
De acuerdo con dicha comisión hasta 2011, último año del que se tienen cifras comparables para 17 naciones de la región, 36.3% de los mexicanos vivían en pobreza, casi 7 puntos porcentuales más respecto al 29.4% de la población latinoamericana que se encontraban en esa condición.
La estadística, señala que los mexicanos en indigencia representaron 13.3% de la población total, cuando la media latinoamericana fue de 11.5%.
Cepal aplica los porcentajes referidos con los 112 millones 336.5 mil habitantes del país contabilizados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en el último censo de población.
En contraste con lo que sucede en México, nueve naciones (ocho latinoamericanas y una centroamericana) reportaron porcentajes de pobreza e indigencia entre su población menores al promedio regional.
Uruguay es el país con el menor porcentaje de pobres, seguido de Chile, Costa Rica y Brasil. Es destacarse que incluso Perú y Ecuador presentan porcentajes menores que México, con 27.8 y 35.4% de su población en esta condición, respectivamente.
En tanto, las cifras de México sólo son mejores a las El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua.
La pobreza abiertamente trae como resultado un sin numero de factores incidentes en la misma, ya que hunden sigilosamente a las pobñaciones que padecen de ella. Para las naciones desarrolladas los resultados de la pobreza son mas difíciles de combatir que los mismos factores que la provocan .
Las resultados de la pobreza son la consecuencia de la mala aplicación y administración de los planes de lucha contra los factores que inciden en la pobreza, y a su vez es el grito de reclamo de quienes la padecen . Son simple y llanamente las formas de vidas adoptadas y las formas de cómo subsistir en medio de la pobreza.
Fin Parte 1…
Adelanto: En la Parte 2 de este reportaje se publicará una entrevista en video con un ser humano en situación de indigencia para explicar de voz propia las razones de su forma de vida, y los índices de pobreza y marginación del municipio de Zacatecas.