D.F, Mex.- Dos presuntos integrantes de Guerreros Unidos aseguraron en un interrogatorio ante infantes de la Armada que Ángel Casarrubias Salgado, uno de los líderes de la organización criminal, fue quien ordenó ejecutar a los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Según un informe de la Procuraduría General de la República incluido en la causa penal 100/2014, Osvaldo Ríos Sánchez «El Gordo» y su hermano Miguel Ángel, «El Pozol», acusados de ser partícipes del crimen, confesaron a los Marinos estar «arrepentidos» y señalaron que los estudiantes fueron enterrados en una fosa localizada en Pueblo Viejo, entre Iguala y Cocula.
«Hace unos días, (refirieron que) se encontraban arrepentidos de la muerte de los estudiantes y que ellos, junto con los del cártel, habían matado a los estudiantes, así como que participó en tales hechos los que denominaban ‘policías bélicos’ y los Guerreros Unidos», se asienta en el oficio PGR/AIC/PFM/UAIOR/DF/CHIMAL/1610/2014.
También la PGR señala en la causa penal 100/2014, del Juzgado Primero de Distrito de Matamoros, que el ex Alcalde José Luis Abarca ordenó detener a los estudiantes y que, una vez en manos de Guerreros Unidos, «El Mochomo» decidió que los mataran.
«Los ‘policías bélicos’ se refieren a los policías municipales de Iguala e incluso sabe dónde los mataron y dónde los enterraron a los estudiantes y que esto fue en inmediaciones de Pueblo Viejo, Guerrero y que el que dio la orden que mataran a todas estas personas fue Ángel Casarrubias Salgado, alias el Mochomo».
Los hermanos Ríos Sánchez fueron detenidos el pasado 8 de octubre en Cuernavaca, Morelos. Para entonces, ya habían transcurrido cuatro días del hallazgo de las fosas con 28 cadáveres en Pueblo Viejo.
En abril y mayo pasado se encontraron 26 cuerpos en el mismo punto donde se hallaron las fosas referidas.
Al día siguiente de sus detenciones, la PGR encontró otras cuatro fosas con ocho cadáveres en las inmediaciones del rancho «La Sierpe», también en Pueblo Viejo, sitio conocido como La Parota.
La PGR no ha informado el resultado de sus análisis periciales sobre los ocho cuerpos, razón por la que se desconoce si se trata de algunos de los normalistas desaparecidos.
En el testimonio que rindió ante la PGR, «El Gordo» señaló que la instrucción de entregar a los estudiantes a los Guerreros Unidos se dio porque entre aquellos había miembros del cártel rival de Los Rojos.
«(La noche del 26 de septiembre) me reporta vía mensaje de PIN, David Cruz Hernández, o sea ‘El Chino’, encargado de la central (de Protección Civil de Iguala), por Blackberry, en el que indica en forma general, a todos los que estamos con PIN y en comunicación con ‘El Chino’, que tenían que llevar a los estudiantes con ‘El Choky’ porque supuestamente entre ellos venían sujetos que pertenecían al cártel de Los Rojos en forma infiltrada», dijo en su declaración del 10 de octubre.
Su hermano «El Pozol» dijo algo similar respecto a la presunta infiltración de delincuentes; sin embargo, refirió que algunos de los normalistas fueron llevados a las fosas tres días después de haber sido secuestrados.
«El ‘Mente’ (subordinado de Jaime, ‘El Choky’, jefe de plaza en Iguala) me dijo que se habían llevado el 29 de septiembre a unos estudiantes de Ayotzinapa, siendo que tuve el conocimiento de que los habían secuestrado a estos de Ayotzinapa, porque iban gente del cartel de Los Rojos, de manera infiltrada.
«Sé que los trasladaron al cerro, rumbo a la localidad de Pueblo Viejo, y la entrada principal es la Avenida Guadalupe y están dos calles en ‘y’ griega, una da para Pueblo Viejo y otra va para Loma del Zapatero; cerca de la principal hay una escuela, y se logra apreciar un árbol, y este árbol es conocido como La Parota», detalló.