Jerez, Zac.- El senador Saúl Monreal Ávila ha salido al paso de las especulaciones sobre su futuro político, asegurando que su aspiración para gobernar Zacatecas sigue siendo «firme e intacta». El político, originario de Puebla del Palmar, defendió su trayectoria, indicando que, aunque se siente orgulloso de pertenecer a una familia política, sus credenciales se basan en el mérito propio y en «27 años de trabajo ininterrumpido al servicio del pueblo».
Aclara Malinterpretación: No se Retira de la Contienda
Monreal Ávila subrayó la autonomía de su carrera frente a la de sus hermanos, Ricardo Monreal y el gobernador David Monreal. «Cada uno de nosotros tiene un estilo propio… mi trabajo habla por mí; no tengo que imitar a nadie», afirmó. Destacó que, tras casi tres décadas de lucha y cercanía con la gente, él ha forjado su propia base de resultados.
El senador fue enfático al aclarar la confusión generada por sus declaraciones anteriores, en las que se interpretó que se retiraba de la contienda. «Aclaro, no me he bajado, solo que, hoy no son los tiempos políticos», puntualizó. Monreal insistió en que respetará los procesos internos, siguiendo el consejo de la dirigencia nacional y de la presidenta Claudia Sheinbaum. Sin embargo, arremetió contra sus adversarios, quienes «aprovecharon la confusión para distorsionar mis palabras» y asegurar su salida.
Cambiando el foco hacia la seguridad estatal, Monreal Ávila emitió un enérgico llamado a las autoridades y a la Fiscalía General de Justicia ante los recientes hechos violentos en Tabasco y Villanueva. «Ojalá no se minimicen estos sucesos, sería muy lamentable volver a episodios de violencia de hace algunos años atrás», advirtió. Subrayó que la región sur del estado (incluyendo Jalpa y Jerez) requiere atención urgente y que Zacatecas no debe «normalizar la violencia».
El senador también abordó la crisis del campo, aludiendo a los recientes bloqueos carreteros de campesinos. Denunció la grave injusticia en la comercialización, ejemplificando que los productores de cebolla venden su kilo a 70 centavos, mientras el precio final es de 30 pesos. «No se vale», sentenció. Ante esta situación, presentó un punto de acuerdo en el Senado y pidió a todos los aspirantes políticos apoyar a quienes «producen la tierra» en lugar de dejarlos solos.
En su crítica a la inseguridad, Monreal Ávila recordó que el Senado aprobó la Ley General contra la Extorsión. Hizo un llamado a la ciudadanía para que denuncie, pues bajo esta nueva ley, cualquier acusación, incluso anónima, debe ser investigada de oficio por la autoridad.